domingo, 20 de octubre de 2013

EL BRITANO CAPITULO 18 ( fic escrito por Brend )

A  la mañana  siguiente me desperté con los ruidos matutinos de la casa . De repente me acordé que Bruno estaba en la cama enfermo !  Abrí los ojos y vi a  Edward  dormitando  sentado en una silla junto a la cama  de  Bruno , evidentemente  Edward  me había llevado al diván dormida  y yo no  me había enterado.



Me levanté y me acerqué a la cama  de Bruno,  dormía ;  Edward  se despertó  de repente un poco avergonzado de  haberse dormido

- Oh   Bella,  me dormí, lo siento.

Me acerqué a Bruno y toqué su frente , abrió los ojos y me miró .

- Ama  Bella ...

- Hola  Bruno, estoy aquí contigo

- Ama  Bella...

Edward dijo que iba a por una cosa y salió de la habitación , entonces  le pedí a Bruno que me contase   todo lo que había sucedido.

- El   me ayudó, un hombre me trajo desde  Roma hasta aquí . No  sé  quien era  pero     me dijo que me llevaría hasta ti  -  y comenzó a llorar. - Ahora  soy feliz  y no me importa  morir  porque sé que estás aqui  a salvo  y segura con Edward .

- Tú no vas a morir  Bruno, estás aquí, nosotros te cuidaremos  - le respondí cogiendo su mano.  En esto entró Edward  con otro hombre .

- Vamos  a lavarte  y a cambiarte de ropa   Bruno,  no tengas miedo  - le dijo  Edward .

Yo salí de la habitación y fui al baño . Me aseé  un poco y  recogí  mi  cabello.  Luego fui a la cocina y pedí comida a Ane.

Al  regresar  Bruno ya estaba limpio y cambiado  de ropa , las sábanas  también habían sido cambiadas .  Bruno  me llamó,  yo me senté junto a él  y puse en una mesa una jarra de sopa caliente .

- Bueno, ya estoy aquí  y voy a quedarme todo el día contigo -  le dije  sonriendo.

- No tengo miedo  ama  Bella,  estoy listo para  morir , estoy en paz .

- No digas eso  Bruno  - dijo Edward  - No  vas a morir,  Bella  y yo te cuidaremos  , ahora tienes que tomarte esa  sopa .

Ayudé a Bruno  a   levantarse  y se bebió la sopa como un niño  bueno.

- Ahora  debes  descansar  todo el día  y mañana estarás  bien   y podrás  levantarte  - le dije .

Pero  no se levantó  pues hacia  el crepúsculo  su corazón  había dejado de latir .


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