jueves, 15 de agosto de 2013

EL BRITANO CAPITULO 5 ( fic escrito por Brend )

Estaba tan completamente feliz en la cama con Edward , que no quería levantarme , pero   debíamos comer para proseguir  nuestro viaje.  Debíamos asearnos y prepararnos para huir  no sé a donde , porque  Edward no me había dicho nada.  Nos  levantamos , nos lavamos y vestimos ,  y salimos a la  taberna.

El tabernero ya nos había preparado una  buena comida :  sopa, carne, pan, verduras, huevos cocidos y tortas para el camino.  Comimos  en silencio  y después  preparamos las alforjas  con todo lo que necesitábamos .  Había un robusto caballo preparado en la cuadra .  Edward  comprobó los arreos  y la silla,  colocamos las alforjas  y me ayudó a subir ;  después  subió  él.
Antes de partir  Edward  me dio un pequeño colgante  con un pececito  tallado en  madera .  Yo  le sonreí  y me lo puse .  Nos despedimos  del tabernero  y partimos  hacia  la costa.

Cuando  ya llevábamos dos horas de camino  secundario,  puesto que habíamos evitado la via  principal,  divisamos a un hombre a lo lejos ;  un hombre  a lomos de un caballo negro. Poco a poco  se nos acercó  y desmontó .  Llegó  hasta  nosotros  como si quisiera  preguntarnos algo.  Edward me dijo que no me moviera  y que confiase en él,  pero cuando  el desconocido llegó  a unos  veinte  pasos de nosotros,  sacó  una espada  y un cuchillo y dijo :

-  Publia  Cornelia, adúltera  ....  Me envía tu padre !  Recuerda tu juramento  y vuelve con tu marido !

Me quedé en shock.  No podía  reaccionar.  Todo lo vi negro cuando Edward  desmontó  y se dispuso a luchar  con el hombre.

- Edward, no !  Te matará !

Pero  Edward  no me hizo caso  y sacando  un gran  garrote  de la silla del caballo  se  preparó  a  luchar.

Entonces  todo ocurrió muy deprisa ....  En la primera   acometida  Edward  pudo  bloquear la espada larga  del asesino  y desarmarle,  pero el cuchillo  aún  seguia  amenazante  y vi  cómo  se clavaba   en el costado de  Edward   !

Sentí  como si todo se hubiera parado  de repente  y el tiempo se hubiese  detenido  cuando vi que  Edward  se tambaleaba  y caía de rodillas .  Bajé de un salto del caballo y me agaché  junto  a mi esposo  del alma .

- Edward  !  Edward  mi amor  !  - fue lo único que pude decir .

- Grita  y  llora  todo lo que quieras  , Publia  Cornelia  -  me dijo  el asesino -  Voy a  llevarte  de  regreso  con tu padre  y con tu marido  !

Le  ignoré   pues quería estar  lo mas cerca  posible de la herida de Edward , que sangraba  abundantemente.  Intenté taparla con  mi pañuelo , presionando.  Miré   la  cara de Edward ,  tenía  los ojos cerrados  y murmuraba algo...  Estaba  hablando con su  Dios ;  pero  su Dios  también era  el mio  y entonces  le hablé  y le rogué  en voz  alta :

- Jesucristo , ayúdanos  por favor !  Yo te lo pido, Jesucristo !   Yo sé  que Edward   cree  en ti ,  y yo  creo en ti también .  Ayúdanos !

Y  entonces .... EL   me  escuchó....



Al  principio  fue un leve temblor de tierra, pero  aumentó y aumentó  hasta que se  convirtió en un terremoto.  El cuerpo de  Edward  se  estremeció con violencia  y  vi que ya  no  sangraba .  Miré  la  herida  y no había rastro de sangre  , y los bordes  del tajo  hecho  por el cuchillo  se habían cerrado, como si un médico los hubiese  cosido.

Agarré fuertemente  con mi mano el colgante  de pez  y  dije :

- Jesucristo ,  me has  escuchado !

Edward  se  levantó como si nada hubiese pasado.  Giré  mi cabeza para ver al asesino   que había enviado mi padre y lo  vi tirado en el suelo , temblando  de miedo .  Cogí  rapidamente   el cuchillo  que  todavía   tenía en la mano,   y se lo quité.  Tuve que abrir  sus dedos uno a uno con fuerza  , pero se lo quité.

Edward  me abrazó protectoramente  y me dijo :

- Estoy orgulloso de ti .

Despues  se agachó , cogió por el cuello al asesino  , lo levantó y dijo :

- Vete  de aquí  y dile  a tu amo  que  Bella  ya no le pertenece  a  nadie !  Ella  es mia  y de  Cristo !  Yo soy  su esposo .

El asesino  intentaba desasirse  de la mano de  Edward  , pero la mano y el brazo   de  Edward  parecían de hierro  y  su voz  era  algo  semejante  al estruendo  del trueno .

Me quedé  eclipsada   mirando la mano de  Edward  , fuerte  y poderosa  ....

Después lo soltó  y el hombre  salió huyendo  en dirección a su caballo , pero el animal  se  había  espantado  a  causa  del terremoto  y no pudo encontrarlo.

Sentí mis rodillas  flaquear  y me derrumbé  al pie de  Edward  , llorando.

- Cristo  te  ha salvado .... Cristo  te  ha salvado !

Edward   me estrechó entre sus brazos y hundió  su rostro en mi pelo.  Nos besamos.  Fue un beso largo  y profundo, que  sabía  a lágrimas  y felicidad .


1 comentario:

  1. Holaaa Brennn me encantoooo ahhh menos mal que edward se salvoo uff dioss ya me estaba asustandooo... Me re gustooo...

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